La mujer en la Luna

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La mujer en la Luna
Ficha técnica
Título original: Frau im Mond
Nacionalidad: Alemania
Estreno 1: 6 de febrero de 1929
Duración: 156 min. (200 min. en la vrsión restaurada)
Ficha artística
Dirección: Fritz Lang
Guión: Thea von Harbou, Fritz Lang
Producción: Productora: O.F.A., Fritz Lang Films
Fotografía: Curt Courant, Oskar Fischinger, Otto Kanturek (Blanco y Negro)
Música: Película muda
Reparto: Gerda Maurus, Willy Fritsch, Fritz Rasp, Gustav von Wangenheim, Klaus Pohl
Información suplementaria
Otros datos: No hay otros datos
Imdb: Ficha en Imdb
Notas:
  1. Fecha de primer estreno. No tiene por qué coincidir con el estreno en salas comerciales o emisión en abierto; puede ser en premieres, festivales u otras formas de distribución reducida o exclusiva.

Fritz Lang (1929)

La mujer en la Luna es una película muda: una de las principales obras de Fritz Lang y una de las pioneras del cine de ciencia ficción.

La trama:

La película está dividida en dos partes claramente diferenciadas.

La primera tiene lugar en la Tierra, narrando las vicisitudes de los futuros viajeros y su lucha contra unos villanos que pretenden apoderarse de sus documentos para emprender un viaje a la Luna y explotar su oro. A lo largo de esta parte se nos muestran los personajes, su trasfondo y se plantea la situación a partir de la cual dará comienzo lo que será el eje de la historia.

La segunda parte tiene lugar durante el viaje y su eje son las aventuras y peligros de quienes finalmente lo emprenden. Es aquí cuando afloran y se resuelven los conflictos entre los personajes.

La película:

Personajes:

Los protagonistas de la película son meros estereotipos: el científico loco, el héroe, el villano... Personajes simples para una historia orientada más a la maravilla de los efectos visuales y de la aventura que a mostrar las inquietudes, motivaciones o evolución de unos personajes que son, básicamente, planos.

De la misma forma, los protagonistas apenas nos sorprenden a lo largo de la película. Su evolución, si la hay, es perfectamente previsible. De esta forma, los malvados son malvados hasta su trágico el final y el triángulo amoroso que se forma es resuelto de forma previsible cuando los peligros de la aventura muestran la cobardía de uno de los pretendientes.

Actuación:

Dada la sencillez de los personajes y de sus emociones, las actuaciones son exageradas, como era habitual en el cine mudo de la época. Privados de la palabra, de los sonidos no articulados y sin más apoyo que unos ocasionales carteles de texto, los actores sólo podían expresar sus "diálogos", su transimisión de información o sus sentimientos y pensamientos mediante sus gestos y movimientos.

De esta forma, la caracterización de los actores, su forma de moverse en pantalla, sus expresiones y sus posturas forzadas nos resultan hoy en día casi cómicas.

Maquetas:

Debido a las limitaciones técnicas de la época en que fue rodada, los efectos visuales nos resultan hoy en día ingenuos y no dejan de despertar una sonrisa. Sin embargo, vistos en su contexto, estos efectos, sin duda alguna, impresionantes.

La maestría en el empleo de maquetas, los movimientos de cámara sobre ellas, la construcción de maquetas y escenarios idénticos pero a distinta escala (las primeras para planos generales, los segundos para la interacción con los actores), la integración de maquetas y actores... Todo este trabajo tiene un nivel de meticulosidad que resulta impresionante.

Documentación:

Se han cuidado también detalles técnicos como la generación de gravedad artificial mediante una aceleración constante o el breve lapso de ingravided al cambiar la orientación del cohete.

Por supuesto, en plenos años '20 apenas se conocían los problemas a resolver para realizar viajes espaciales. Robert Goddard había lanzado su primer cohete de combustible líquido apenas tres años anters del estreno, e incluso las V2 nazis eran todavía un futuro a décadas vista. Por este motivo apenas hay parecido entre la película con lo que acabaría siendo la realidad de los viajes espaciales.

Pese a ello, el intento de rigor técnico permite clasificarla como ciencia ficción dura.