Diferencia entre revisiones de «Beep»

De Alt64-wiki, la enciclopedia libre.
Saltar a: navegación, buscar
Línea 52: Línea 52:
 
[[Categoría:Literatura de ciencia ficción]]
 
[[Categoría:Literatura de ciencia ficción]]
 
[[Categoría:Cuento]]
 
[[Categoría:Cuento]]
[[Categoría:Literatura entre 1951 y 1962]]
+
[[Categoría:Literatura de los años 1950|4]]
 
[[Categoría:Edad de plata]]
 
[[Categoría:Edad de plata]]

Revisión de 22:24 22 mar 2010

Advertencia-64.png

¡Atención, spoilers!

Aquí se desvelan detalles de la trama y el argumento


Beep
Autor: James Blish
Otros títulos: {{{Otros títulos}}}
Datos de primera publicación(1):
Título original: Beep
Revista o libro: 'Galaxy Science Fiction'
Editorial: Galaxy Publishing Corporation
Fecha Febrero de 1954 de {{{Año}}}
Publicación en español:
Publicaciones(2): 'Imperios galácticos (Recopilación de Brian W. Aldiss)
Otros datos:
Saga: No pertence a ninguna saga
Premios obtenidos: No se le conocen
Otros datos: No hay otros datos
Fuentes externas:
Tercera Fundación [{{{URL-3F}}} Ficha]
ISFDB [{{{URL-ISFDB}}} Ficha]
Otras fuentes {{{URL-OtrasFuentes}}}
Notas:

  1. De la presente variante. Puede haber variantes anteriores. Consultar la fuente externa para ampliar información.
  2. Publicaciones en español las que la presente variante ha aparecido. Puede haber otras publicaciones de esta misma u otras variantes. Consultar la fuente externa para ampliar información.

James Blish ({{{Año}}})

James Blish (1954)

La historia:

El relato comienza con un agente del Servicio llevando a cabo una misión típica: vigilar un chico-conoce-chica.

Tras verificar que, efectivamente, el encuentro tiene lugar, regresa al cuartel y presenta el informe a su superior. Durante la conversación el agente comunica a sus superior dudas que le han surgido acerca de su trabajo. Muestra su convencimiento de que el interés del Servicio en las misiones chico-conoce-chica es debida a que están interesados en los niños resultantes de dichos encuentros. Esto necesariamente implica que el Sservicio conoce al menos parte del futuro, pero el agente no entiende cómo esto puede ser posible.

Tras esta introducción, su superior indica que ya estaba preparado para esta pregunta y que, por el hecho de haberla realizado, el agente acaba de ser ascendido. Tras esto comienza a explicar el origen del conocimiento del futuro, cono lo que la historia realiza un flash-back.

Durante el flash back se nos cuenta cómo el Servicio acaba de disponer de un medio de comunicación instantaneo (similar al ansible) que permite, por fín, comunicarse en las largas distancias interestelares. El único inconveniente de este sistema es un beep que aparece al principio de cada mensaje y que es sistemáticamente eliminado.

Sin embargo, pronto resultan desconcertados cuando una periodista acude a ellos con predicciones del futuro que ha realizado un informante que se ha dirigido a ella.

Las predicciones resultan ser ciertas, por lo que el Servicio comienza a investigar el tema. Se ponen en contacto con el informante y éste les reclama una desorbitada suma de dinero a cambio de sus predicciones. El Servicio lo rechaza y trata de encarcelar al informante, pero no son capaces de demostrar que haya cometido delito alguno.

Finalmente, y tras otros curiosos giros del argumento, se descubre que el origen de las predicciones es el beep de los mensajes que el Servicio está eliminando. La comunicación instantanea se realiza con todo aparato en cualquier lugar y en cualquier instante. Es decir, en el molesto beep están condensados todos los mensajes emitidos por ese medio, tanto presentes como pasado como futuros. Sólo hay que pasar el beep a velocidad lenta para poder leer los mensajes.

Libre albedrío:

En este relato Blish parece eliminar todo vestigio del libre albedrío. Las cosas ocurren porque van a ocurrir, y son inevitables.

"(...) Yo iba a hacer esas cosas. No había alternativas, ninguna fantástica "rama temporal", ningún punto de decisión que pudiera ser alterado para hacer que el futuro cambiara. Mi futuro, como el suyo, como el del doctor Wald, y como el de cualquier otro, estaba prefijado."

Tan sólo deja dos pequeños resquicio a la libertad de actuación. El primero de ellos es que cuanto más lejanos sean los mensajes recibidos, tanto más incomprensibles se harán por carecer de contexto:

"(...) Sabréis el futuro, pero no sabréis comprender la mayor parte de él. Cuanto más lejos viajéis con la máquina, los mensajes se harán más y más incomprensibles (...)."
"(...) el efecto Dirac simplemente desliza el punto de mira de la conciencia hacia adelante desde el presente hasta una cierta distancia. -lo que aún está por ver es si esta distancia es de quinientos años o de cinco mil."

El otro resquicio es algo menos filosófico, más abierto y mucho más obvio:

"(...) Los únicos eventos que nosotros podemos volver a oír son los transmitidos como mensajes. ¿Usted encarga su almuerzo mediante un Dirac?"