Saga del piloto Pirx
La saga del piloto Pirx está compuesta por una serie de relatos y novelas escritos por el escritor polaco Stanislaw Lem, todos ellos protagonizados por Pirx.
A lo largo de estas historias el lector asiste a la progresión de la carrera de Pirx, desde el mismo momento de su examen para piloto hasta su muerte tras haber ascendido por el escalafón.
Temática:
En la primera parte de los relatos asistimos al desarrollo de Pirx como piloto, como persona y como profesional. Es este último punto en el que parece hacer especial hincapié Lem, pues queda claro que una de las principales características de Pirx es su creciente toma de conciencia respecto a sus responsabilidades.
Adicionalmente, Lem no presenta a su protagonista como un superhombre, un héroe al estilo típico. Siendo estudiante tendrá la cabeza en las nubes y el mismo lector no apostaría que sería alguna vez capaz de superar las duras pruebas exigidas para ser piloto. Durante sus prácticas, será el ímpetu juvenil, el orgullo por haber conseguido este objetivo, casi la arrogancia, la que predomine; pero a medida que Pirx adquiera experiencia, irá tomando perspectiva respecto a su entorno, hasta terminar colocándose en el verdadero lugar que le corresponde.
En sucesivas aventuras, veremos que el cada vez menos joven Pirx dista mucho de querer ser un héroe: su responsabilidad es el cargamento que se le ha confiado y para realizar bien su trabajo debe entregarlo en el puerto indicado en el menor tiempo posible, teniendo lista la nave para tomar otra carga y salir cuanto antes hacia otro destino.
No obstante, Pirx tampoco será dibujado como un cínico materialista; ante las situaciones de emergencia, cuando su ayuda sea recabada, tratará igualmente de desempeñar el cometido que temporalmente se le haya asignado.
En definitiva, Lem hace el dibujo de un joven que no es ideal, pero que es un ejemplo a seguir. A través de su figura tenemos la visión del autor acerca de la propia humanidad, compuesta por una buena dosis de realidad y aderezada con una moderada fe en sus buenas intenciones.
La segunda parte de relatos se alejan del tema humano como sujeto inmediato de las acciones para empezar a presentar una nueva perspectiva de la humanidad a través del estudio de los robots. Lem escribirá una serie de relatos de robots no asimovianos, robots con cerebros más impredecibles, descritos como seres melancólicos, en equilibrio entre la impotencia y la astucia para rebelarse, aunque sea minimamente. Robots que enseñan en parte lo que es o debería ser el ser humano.
Finalmente, Fiasco es una obra atípica dentro de la saga, y bien podría no estar protagonizada por Pirx. En esta última aventura, el antiguo piloto es enviado junto con un grupo de científicos a una expedición que busca establecer el primer contacto con otra civilización no humana. La dificultad (e incluso la imposibilidad) de este contacto, tema recurrente en el escritor polaco, será el eje fundamental de la obra, mucho más pesimista que los relatos anteriores.
La ambientación:
El escenario de los relatos es principalmente el propio Sistema Solar, con la salvedad de los sucesos narrados en El accidente, y en Fiasco.
En este sentido, Lem es notablemente riguroso y describe los viajes interplanetarios por el sistema de manera muy real, repletos de incomodidades, largos, tediosos y peligrosos.
Las naves espaciales son realmente cohetes de despegue vertical y se describen con acierto las situaciones comunes de ingravided y acelereración. La opción escogida como método propulsor es siempre el motor atómico y Lem otorga enorme importancia al reactor de la nave, atendido por técnicos especializados y lugar donde incluso ambienta uno de los relatos, Terminus.
No olvida tampoco multitud de detalles, como la descripción de los sistemas de balizas para la navegación entre la Tierra y la Luna, el diseño amplio de los puertos espaciales, más semejantes a aereopuertos que a la especie de garajes terminales a los que nos tiene acostumbrados la Space Opera, una correcta proporción de distancias y velocidades, el uso de terminología adecuada, la radición espacial o los años solares (el "Año del Sol Tranquilo").
Aparte del propio cohete, Lem ambienta relatos en la Luna (La cacería) y Marte (Ananke), y el principio de Fiasco lo sitúa en Titán, luna de Saturno, planeta cuyos anillos visitará también en El proceso. En todos estos casos, el tratamiento de las características del planeta o satélite (totalmente diferente a la Tierra) es acertado. Lem tiene en cuenta asuntos como la menor atracción gravitatoria y sus consecuencias en la velocidad o el rozamiento, la propagación del sonido o la luz en otros medios diferentes a la atmósfera terrestre.
Obras comprendidas:
La mayoría de las obras que componen la saga son relatos recopilados en la doble antología titulada Relatos del piloto Pirx. Posteriormente, Lem escribiría una nueva novela tomando a este personaje como protagonista, titulada Fiasco, y que puede considerarse la tumba de Pirx.
La cronología interna de la saga sería la siguiente:
- Reflejo condicionado (1963) Finales del cuarto curso como cadete en la escuela de pilotos.
- La prueba (1959) Examen de graduación de Pirx.
- La patrulla (1959) Piloto de Patrulla.
- La Albatros (1959) Pasajero, se dirige a incorporarse como segundo de a bordo
- Terminus (1961) Primera comandancia de Pirx, la Estrella Azul
- La cacería (1965) Comandante en espera de la carga, en la Luna
- El accidente (1965) Comandante en tareas de explorador en el planeta Jota-116-47 Próxima Acuario
- El cuento del piloto Pirx (1965) Una de sus primeras comandancias. Recogiendo chatarra alrededor del Sol
- El proceso (1968) Comandante de la Goliat en una misión de prueba con tripulantes androides
- Ananke (1971) Comandante, integrante de una comisión de investigación en Marte
- Fiasco (1986)
