Star Trek IV: Misión: salvar la Tierra

De Alt64-wiki, la enciclopedia libre.
Saltar a: navegación, buscar
Star Trek IV: Misión: salvar la Tierra
Ficha técnica
Título original: Star Trek IV: The Voyage Home
Nacionalidad: EE.UU.
Estreno 1: 26 de noviembre de 1986
Duración: 119 min.
Ficha artística
Dirección: Leonard Nimoy
Guión: Harve Bennett y Leonard Nimoy (basada en la serie de televisión Star Trek de Gene Roddenberry y Alan Dean Foster)
Producción: Harve Bennett... para Paramount
Fotografía: Donald Peterman
Música: Leonard Rosenman
Reparto: William Shatner (Almirante Kirk), Leonard Nimoy (Capitán Spock), DeForest Kelley (Dr. Leonard McCoy), Nichelle Nichols (Niota Uhura), James Doohan (Montgomery Scott), Walter Koenig (Pavel Chekov), George Takei (Hikaru Sulu), Catherine Hicks (Gillian Taylor)...
Información suplementaria
Otros datos: No hay otros datos
Imdb: Ficha en Imdb
Notas:
  1. Fecha de primer estreno. No tiene por qué coincidir con el estreno en salas comerciales o emisión en abierto; puede ser en premieres, festivales u otras formas de distribución reducida o exclusiva.

Leonard Nimoy (1986)

La película:

Existe una teoría entre los entendidos en esta saga según la cual las películas pares son las mejores. Bien, habría mucho que discutir al respecto, pero lo que si está claro es que esta cuarta entrega en muy superior a la anterior.

Como si se tratara de un serial, seguimos viendo desarrollarse alguna de las consecuencias de los acontecimientos narrados en la segunda, La ira de Khan. Recordemos: la Federación investiga un proyecto llamado Génesis para crear vida en lunas desérticas, proyecto que desarrolla el hijo de Kirk y que roba Khan, antiguo enemigo de Kirk. En la batalla final, muere Spock y su cuerpo es lanzado al planeta Génesis. Sin embargo, Spock había depositado su mente en el doctor McCoy, una especie de forma de preservarse. No obstante, le hace falta su cuerpo muerto para poder hacer algo con él, cuestión que no se explica muy bien. Para recuperar el cuerpo y así preservar la mente de Spock, Kirk roba el Entreprise y se dirige a Génesis, sólo para descubrir que un klingon maniaco se le ha adelantado, ha destruido la nave que vigilaba el proyecto y ha matado a su hijo. Kirk se ve obligado a destruir el Enterprise al tiempo que descubre que milagrosamente Génesis ha regenerado el cuerpo de Spock, una cáscara vacía ideal para reintroducir su mente, una auténtica resurrección.

La cuarta entrega comienza con un Spock en proceso de recuperación de sus recuerdos y de sus sentimientos que debe re-humanizarse poco a poco. Kirk y sus fieles oficiales han decidido volver a la Federación para asumir los cargos (se dice que han contravenido hasta nueve leyes de la Federación). Están en ello, heroicos y sacrificados, cuando, muy oportunamente, aparece una sonda espacial extraterrestre que en su avance roba la energía eléctrica de cuanto aparato se pone a su alcance, rumbo a la Tierra.

Inmediatamente, Spock deduce que la sonda quiere hablar con una ballena, especie extinta hace tiempo. Si nadie la responde, terminará por destruir a la humanidad.

La solución, viajar al pasado en busca de una ballena y salvar el mundo. Y de paso, gracias a semejante acción heroica, conseguir un trato favorable en el juicio por traición.

Viajes en el tiempo

Parece que en la serie de televisión el Enterprise ya había viajado en el tiempo, por lo que Spock no tarda demasiado en realizar los cálculos adecuados para hacerlo. Básicamente, el método utilizado consiste en girar alrededor del Sol a una velocidad muy alta. Viajar más rápido que la luz en la influencia de una gran masa al parecer produce esos efectos.

La confrontación de viajeros del siglo XXIII con las “medievales” costumbres de finales del siglo XX es responsable de gran parte de la amenidad de la película.

Una obra de equipo

Muy acertada resulta la división de la tripulación en tres equipos, cada uno con un objetivo específico concreto, aprovechando como pocas veces los diferentes caracteres y aptitudes de cada uno de los oficiales.

Scotty, ayudado por la labia de McCoy, se hará pasar por un científico escocés que ofrecerá a un jefe de fábrica la posibilidad de producir un material transparente y de gran resistencia, material que utilizarán para crear una pecera para las ballenas.

Sulu, piloto de la nave, se las ingeniará para hacerse con un helicóptero y pilotarlo para transportar el “aluminio transparente” hasta la nave.

Chekov y Uhura se encargarán de introducirse en el portaviones nuclear Enterprise para recoger energía con la que recristalizar el dilitio, ya que necesitan recargar baterias para el costoso viaje de regreso. Chekov, que hasta el momento no había tenido acento en las anteriores películas, muestra aquí un marcado acento ruso. Por supuesto, será descubierto por los marines norteamericanos del portaaviones e interrogado sobre su identidad.

Finalmente, Kirk y Spock se encargarán de convencer a Gillian, una bióloga del acuario de San Francisco, de que colabore con ellos para llevarse a las ballenas.

Es esta bióloga la única nota disonante en una trama coral bien engrasada. Un personaje, como muchas otras veces, que sobra, no aporta nada y desagrada por su obviedad y su pésima interpretación. Grita, pierde los nervios, sobreactúa su dolor por la liberación de las ballenas, que quedarán expuestas al peligro de los balleneros... Un verdadero dolor de estómago.

Final feliz

De regreso al futuro, salvarán al Tierra. Por eso, en el juicio se leerán los cargos contra la oficialidad del Enterprise (que misteriosamente ya sólo son seis) y serán retirados todos menos uno, el de desobediencia, que afecta sólo al almirante Kirk. Por eso, será degradado a capitán y asignado al servicio del nuevo y flamante Enterprise NCC 1701-A.

Premios:

Obtenidos:

  • 1987: Premio Saturn a mejor vestuario
  • 1987: Premio ASCAP (premio musical) a Leonard Rosenman
  • 1987: Prémio Génesis (premio pro-defensa de los animales) a la mejor película de aventuras

Finalista:

Saga de Star Trek

Siglo XXII Siglo XXIII Siglo XXIV

Tabla ampiada