Cuatro siglos de buen gobierno

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Cuatro siglos de buen gobierno
Autor: Nilo María Fabra
Otros títulos:
Datos de primera publicación(1):
Título original: Cuatro siglos de buen gobierno
Revista o libro: Por los espacios imaginarios (con escalas en la Tierra) (1885)
Editorial:
Fecha Fecha desconocida de 1885
Publicación en español:
Publicaciones(2): Por los espacios imaginarios (con escalas en la Tierra) (1885)
Historia y antología de la ciencia ficción española (2014)
Otros datos:
Saga:
Premios obtenidos:
Otros datos:
Fuentes externas:
Tercera Fundación Ficha
ISFDB Ficha
Otras fuentes  
Notas:

  1. De la presente variante. Puede haber variantes anteriores. Consultar la fuente externa para ampliar información.
  2. Publicaciones en español las que la presente variante ha aparecido. Puede haber otras publicaciones de esta misma u otras variantes. Consultar la fuente externa para ampliar información.

Nilo María Fabra (1885)

Cuatro siglos de buen gobierno es la primera ucronía española conocida. Al parecer, fue publicada por primera vez en 1883 en la revista La Ilustración Española e Iberoamericana nº XLIV; y con ciertas probables variaciones, recopilada en la antología posterior Por los espacios imaginarios (con escalas en la Tierra), en 1885, que recoge este y otros relatos de proto-ciencia ficción que escribiera el periodista político Milo María Fabra, creador de la "agencia Fabra", germen de la "agencia EFE".

Las premisas:

El punto de inflexión con respecto a la historia tal y como fue es el año 1504, cuando, a la muerte de Isabel la Católica, hereda el trono de Castilla el infante Miguel de la Paz, hijo de Manuel I de Portugal e Isabel de Trastámara (hija de los reyes españoles). En realidad, Miguel y su madre murieron en el parto, en 1500, y el trono de Castilla pasó a ser heredado por Juana (la Loca), otra hija de los católicos casada con Felipe el Hermoso. Fernando el Católico conseguiría hacerse con la regencia del reino hasta la mayoría de edad de Carlos I, hijo de Felipe y Juana. Y Carlos terminaría reuniendo bajo su trono diversos reinos europeos que le empujarían a una sucesión de guerras por defender esta herencia y que supondrían en gran medida el inicio del declive del Imperio desde su misma formación.

Sin embargo, sobreviviendo Miguel, este sería el heredero que reuniría no sólo Castilla y Aragón, sino también Portugal, una unión peninsular llamada Ibería que sería la primera potencia naval de la época de manera indiscutible y perdurable.

Dan así principio cuatro siglos de buen gobierno, con una dinastía ilustrada, alejada de guerras religiosas, benévola con las colonias de ultramar, que tiene en cuenta el bienestar de sus súbditos antes que sus intereses familiares... Una completa utopía, en definitiva.

El relato:

Imaginación y coherencia interna son las dos características principales de esta obra. Sin embargo, visto con un poco de perspectiva, Fabra no hace otra cosa que enmendar la historia de España, sin generar una verdadera especulación. Su desarrollo narrativo, más allá del punto de inflexión histórico, se limita a buscar los principales fallos estratégicos y políticos que comúnmente se mencionan a la hora de delatar las causas de la pérdida del imperio.

Fabra era un periodista político, no se dedicaba a la literatura de manera profesional; en este relato encontramos estos defectos y virtudes, así como vemos reflejado el pensamiento de un hombre consciente de su época y de la lamentable situación política de España en esos años. Pese a tratarse de una maravillosa utopía, el fondo de la historia es un continuado lamento, un listado de faltas, una mirada al pasado con nostalgia por lo que no fue.

No hay que confundir este relato con una crítica a la monarquía, sino todo lo contrario. Justamente Fabra imagina una serie de reyes tan sabios y buenos que en cada una de las ocasiones hacen lo correcto para su pueblo y para mayor gloria de Iberia, lo que es sinónimo que decir lo mejor para el mundo entero. Iberia frena a la avariciosa Inglaterra, impide la manipulación de los Estados Unidos en Sudamérica, detiene la amenaza del Islam, vence a Napoleón y libera Europa, desdeña la sangrienta revolución francesa porque sus sistema político ya es mejor y más libre que el francés... Y así hasta el presente.

En lo literario, lo escrito se deja leer y hasta constituye un ameno repaso histórico. No es ninguna joya artística, sin embargo, aunque su lectura sea interesante.